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¿De qué forma se regula la insulina en la sangre?

La insulina es una hormona que genera nuestro organismo, en particular en el páncreas, cada vez que ingerimos alimentos o bebidas a fin de que puedan ser empleados como energía.

La insulina cumple una misión esencial que es regular el nivel de azúcares o glucosa en la sangre.

La glucosa es la principal fuente de energía para nuestro organismo y nos permite trabajar desde el ejercicio más intenso a las actividades cotidianas. Sin una presencia de insulina, nuestro cuerpo no será capaz de usar la glucosa en nuestras células para generar energía y así permanecerá en el torrente sanguíneo provocando la hiperglucemia.

¿Cómo se comprueban los niveles de insulina y glucosa?

Para conocer el nivel de insulina en la sangre, un especialista toma una muestra de sangre, que luego se va a utilizar para un examen para comprobar la cantidad y aparición de esta hormona en la sangre.

Para comprobar el azúcar en sangre, se tienen disponibles 2 procedimientos:

• Examen de A1C
• Prueba de glucosa en la sangre

La auto medición: la prueba se realiza colocando una gota de sangre en una tira en la que un aparato detectará el resultado de la glucosa en la sangre. Esta prueba se realiza con asiduidad por las personas con diabetes para conocer el nivel de glucosa.

¿Qué es la resistencia a la insulina?

La resistencia a la insulina ocurre cuando esta hormona no actúa correctamente y como resultado hay un alargamiento del tiempo en el que la glucosa está presente en la sangre.

Elevados niveles de glucosa pueden estar relacionados con la presencia de la diabetes, que se divide en 2 tipos: tipo 1 y tipo 2.

¿Cuáles son algunos aspectos buenos para disminuir la insulina?

Para bajar el nivel de insulina:

• Mantener una dieta saludable y evitar productos ultra procesados cargados de azúcares. Disminuir la ingesta de carbohidratos, especialmente los simples colabora en la disminución de los niveles de insulina
• Tener una rutina habitual de ejercicio físico. Puede ayudar a acrecentar la sensibilidad a la insulina y como resultado que las células puedan aprovechar de la mejor forma la glucosa disponible.
• Bajar de peso: puede reducir el riesgo de diabetes y colaborar en el mantenimiento de niveles saludables de azúcar en sangre.
• Aumentar la cantidad de fibra en la dieta: ayudará a un aumento gradual y programado del azúcar en sangre.
• Índice glucémico: Optar por aquellos alimentos que contengan un índice glucémico bajo.

Asegúrate de gozar de un descanso acorde: puesto que la hormona del crecimiento se genera durante el sueño. La falta de descanso procede a la producción de cortisol, una hormona de estrés que se ve implicada en la normativa de los niveles de glucosa.